sábado, 1 de agosto de 2020

Pandemias, controles y otras materias

Y de repente.., nada.
Se para el mundo.
Temeroso..,
de pensamientos me inundo.

Un virus que mata.
El trabajo se acaba.
Todos en casa
con distancia separada.

Libre es el miedo,
grande el temor.
Recemos el credo,
nuestro salvador.

Caras sin rostro,
montes vacíos.
Alto es el costo
de este sinsentido.

El verde se venga,
retoma su espacio.
En la calle, en la playa
o en algún palacio.

La gente cocina,
para el tiempo.
Pide sal a la vecina,
con distancia, todo lento.

Y de repente, todo.
El mundo camina.
Menos doblones
y más sal fina.

Muchas noticias,
entierros sin ruido.
Mucha avaricia
de cuerdos, no idos.

Finales reclusos,
controles potentes.
Principios convulsos
soportan las gentes...